Cuando llegamos a una casa de vacaciones o entramos en una casa cerrada mucho tiempo, lo habitual es encontrarnos con polvo acumulado, olor a humedad y una sensación de desuso. Después de varias semanas o meses sin habitarla, los ambientes se cargan, las superficies pierden brillo y hasta los electrodomésticos pueden necesitar una limpieza profunda. Si acabas de regresar y te preguntas cómo limpiar la casa después de las vacaciones para que vuelva a ser un lugar cómodo y saludable, esta guía te mostrará paso a paso qué hacer para dejarla impecable y lista para disfrutar.

Ventila bien la casa y elimina el olor a cerrado
El primer paso al llegar a una vivienda es ventilar la casa de vacaciones o la casa cerrada mucho tiempo. Abrir puertas y ventanas durante varias horas permite renovar el aire, reducir la humedad acumulada y eliminar esa sensación de encierro.
Para eliminar el olor de una casa cerrada puedes recurrir a trucos naturales muy efectivos: coloca recipientes con vinagre blanco en diferentes estancias, utiliza bicarbonato de sodio para absorber los malos olores o aprovecha plantas aromáticas que refresquen el ambiente. Son soluciones sencillas, económicas y seguras.
Limpieza en seco y retirada de polvo acumulado
Para realizar una limpieza profunda en una casa cerrada es importante seguir un orden de arriba abajo. Empieza retirando el polvo de techos, paredes y lámparas, y continúa con muebles, estanterías y ventanas para que la suciedad no vuelva a caer sobre las superficies ya limpias.
Si te preguntas cómo limpiar una casa deshabitada sin perder tiempo, utiliza plumeros de mango largo o aspiradoras con boquillas especiales para alcanzar rincones y zonas altas, garantizando un resultado más eficaz.
Cocina y baño tras las vacaciones
Desinfecta superficies y electrodomésticos
La limpieza de la cocina en una casa de vacaciones no solo consiste en quitar el polvo, sino en garantizar que los electrodomésticos y las superficies estén libres de bacterias. Según la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), la nevera es uno de los puntos con más riesgo de contaminación cruzada si no se limpia a fondo tras un periodo de inactividad. Vacíala por completo, desecha los alimentos caducados y limpia su interior con una mezcla de agua y bicarbonato. En el caso del horno y la campana extractora, elimina restos de grasa con productos desengrasantes específicos o soluciones caseras de vinagre y limón, que además ayudan a neutralizar los olores. De este modo, prolongas la vida útil de los aparatos y aseguras un entorno higiénico.
Limpieza completa del baño
Para limpiar el baño de una casa cerrada conviene prestar atención a los puntos donde la humedad se acumula con mayor facilidad. La grifería, las juntas de la ducha y los desagües son focos habituales de cal, moho y bacterias. Un estudio de la EPA (Agencia de Protección Ambiental de EE.UU.) indica que la acumulación de moho puede aparecer en tan solo 48 horas en ambientes húmedos y mal ventilados. Utiliza productos antical para grifos y mamparas, vinagre blanco para las juntas y desinfectantes adecuados para el inodoro y la ducha. Además, recuerda dejar circular el aire después de la limpieza para evitar la aparición de humedad recurrente. Con estas acciones no solo mejoras la higiene, también previenes problemas de salud relacionados con la humedad y las bacterias.
Suelos y alfombras en casas cerradas
Cuando se trata de limpiar los suelos de una casa cerrada es importante seguir un orden: primero barrer o aspirar para retirar el polvo acumulado y después fregar con el producto adecuado según el material. En suelos de mármol o terrazo se recomienda utilizar limpiadores neutros para no dañar el brillo, mientras que en suelos de madera o parquet es mejor optar por soluciones con poca agua para evitar deformaciones. En baldosas cerámicas puedes añadir un chorrito de vinagre al agua de fregado para potenciar la desinfección y neutralizar olores.
En cuanto a la limpieza de alfombras en una casa de vacaciones, la acumulación de polvo y ácaros puede afectar a la calidad del aire y causar alergias. Según la Sociedad Española de Alergología, las alfombras pueden retener hasta cuatro veces más polvo que un suelo liso si no se limpian con regularidad. Lo ideal es aspirarlas por ambas caras y, si es posible, exponerlas al sol unas horas para eliminar bacterias y humedad. Para manchas difíciles, utiliza una mezcla de agua con bicarbonato o productos específicos para tejidos. Estas prácticas ayudan a mantener la casa fresca, higiénica y lista para disfrutar tras un periodo de desuso.
Prevención de humedad, moho y plagas
Cómo tratar la humedad en casas cerradas
Para controlar la humedad en una casa cerrada o de vacaciones y evitar daños estructurales o proliferación de moho, lo ideal es mantener niveles entre el 30 % y 50 % con deshumidificadores o aire acondicionado según aconseja la EPA. También conviene ventilar periódicamente, usar extractores en cocina y baño, y sellar ventanas, puertas y grietas que dejen pasar la humedad.
Qué hacer si aparece moho
Si detectas moho en una casa de vacaciones, actúa rápido: primero elimina la filtración de agua, seca bien la zona y limpia con detergente o jabón y agua caliente. Si el área afectada es pequeña, la EPA recomienda protegerse con guantes, ventilar bien y evitar mezclar lejía con amoniaco.
Medidas para evitar plagas en casas de vacaciones
Para evitar plagas en casas cerradas, asegúrate de cerrar correctamente las llaves de paso del agua, evitar dejar comida expuesta o ropa húmeda, y realizar controles periódicos de filtraciones o manchas de moho que puedan atraer insectos o roedores.
Limpieza rápida si solo vas unos días
Si solo vas a pasar un fin de semana o unos días en tu segunda residencia, lo ideal es realizar una limpieza rápida en tu casa de vacaciones para que esté lista sin invertir demasiado tiempo. La clave está en centrarte en las zonas de uso inmediato y dejar el resto para otra ocasión.
Aquí tienes un checklist exprés para preparar la casa de vacaciones antes de instalarte: 1) Ventila bien todas las estancias para renovar el aire, 2) limpia las superficies principales como mesas, encimeras y baños, 3) revisa la nevera y los electrodomésticos que vayas a usar, 4) cambia la ropa de cama y las toallas, 5) pasa una aspiradora rápida o barre los suelos más transitados, 6) comprueba que no haya humedad ni restos de polvo en dormitorios y salón. Con estos pasos tendrás tu casa lista y confortable en menos de una hora.
Consejos de mantenimiento si tu casa está cerrada mucho tiempo
Para mantener una casa vacía limpia y en buen estado, lo más importante es realizar revisiones periódicas aunque no vivas allí. Una visita cada pocas semanas ayuda a ventilar, detectar posibles fugas de agua o signos de humedad y evitar que el polvo y los olores se acumulen.
Entre los cuidados más efectivos para una casa deshabitada destacan: limpiar o sustituir los filtros del aire acondicionado o calefacción al menos cada tres meses, dejar recipientes con absorbentes de humedad como sal o bicarbonato en las estancias más propensas a condensación, tapar desagües y mantener persianas ligeramente abiertas para permitir la entrada de luz natural. Estos pequeños trucos reducen la aparición de moho, mejoran la ventilación y garantizan que tu vivienda esté lista para usarse en cualquier momento.
¿Cuándo contratar una empresa de limpieza?
Hay situaciones en las que lo mejor es acudir a una empresa de limpieza para casas de vacaciones o viviendas cerradas. Si la suciedad es extrema, existen problemas de humedad difíciles de eliminar o simplemente no dispones de tiempo suficiente, la ayuda profesional garantiza un resultado rápido y eficaz.
En Limpiezas Jaén somos expertos en la limpieza profesional de casas cerradas o de vacaciones en Granada y Jaén. Contamos con el equipo y la experiencia necesarios para dejar tu vivienda en perfecto estado, lista para que disfrutes de ella sin preocupaciones.